jueves, 14 de octubre de 2010

QUE HA MUERTO





QUE HA MUERTO

Que ha muerto la poesía,
en hombros la llevan ya,
cuatro versos del soneto
el arte van a enterrar.

Estrofas de mil colores
la quieren acompañar,
tercetos y seguidillas
no cesan de suspirar:
arte grande, arte chico,
llevan su herida mortal.

La métrica está dormida,
la rima padece igual,
dolencias sienten las dos
que nadie las quiere usar:
acordes y consonancias
en un desuso total.

Vista la musa de negro,
lo armonioso yerto está,
puñales de filos nuevos
le cortaron su rimar
y en una sombra de olvido
duerme ya sin despertar.

Que lloren, luna y luceros,
el cielo de luto está,
los campos, las rosaledas,
los misterios de la mar;
que al duendecillo de coplas
se le quebró su cantar.

Poetas y trovadores
llevan dolor de pesar,
entre romances de angustias
tristes y soñando van;
fijas llevan sus miradas
y dolor de eternidad.

Que murió la poesía,
sediento quedó el rosal,
las rosas ya marchitadas
el último adiós le dan.

Que los versos de un soneto
en hombros la llevan ya.

.oOo.

-Manuel Cornejo González-